Gestión emocional durante la crisis

29 Apr 2020

Mantener el foco en nuestros objetivos de búsqueda es hoy una tarea desafiante. Doblegar un contexto como el que presenta la pandemia del Covid – 19 requiere de una preparación de alto performance y en ese proceso la gestión de nuestras emociones juega un rol fundamental.

Tal como sucede con los deportistas de alto rendimiento, el trabajo que nos va a conectar con nuestros objetivos requiere de una mente clara.

En épocas de crisis esa claridad puede verse empañada por la aparición de emociones negativas que afloran espontáneamente cuando sentimos una pérdida de control sobre nuestro entorno.

En la metodología de LHH, por ejemplo, el proceso de transición de carrera se desarrolla en una curva de cambio que posee las siguientes etapas: término, aceptación, desorientación, reorientación y renovación del compromiso. La rapidez con la cual transitemos por cada una de ellas posee una relación directamente proporcional a la capacidad que tengamos de hacer una adecuada gestión de nuestras emociones.

Una herramienta que nos permite abordar este proceso es la identificación de la tríada: pienso, actúo y siento. Normalmente los pensamientos negativos sobre una situación generan acciones negativas y el resultado producirá sentimientos en esta misma línea.

A continuación comparto con algunos consejos para gestionar nuestras emociones de manera exitosa:

  • Generar dinámicas de autocuidado cuando detectamos una emocionalidad negativa: En el contexto actual, muchas personas han decidido dejar de ver noticias para no exponerse a una construcción parcial de la realidad que no nos aporta en nuestro desempeño diario.
  •  Trabajar en la construcción de un mindset positivo: la forma de pensar inunda la emoción y los estados de ánimo. No son las cosas las que nos perturban, sino que la forma en que las vemos.
  • Entrenamiento asertivo: debemos ser capaces de expresar nuestras emociones en el momento oportuno y con las personas adecuadas. Ese equilibrio nos permitirá abrir puertas a las oportunidades de futuro.
  • Ser el líder de mi proceso de transición: la búsqueda de un nuevo desafío laboral es un proceso donde el autoliderazgo juega un rol clave. Seremos mejores referentes de equipo si alcanzamos nuestras metas con excelencia en esta etapa.

La preparación para conseguir nuestros objetivos profesionales en un contexto de crisis comienza con nuestra gestión emocional, la construcción de un mindset positivo, y todas aquellas acciones que nos permitan comunicar nuestra propuesta de valor con claridad en un mercado altamente desafiante. Sin duda, es un trabajo arduo, pero nos conecta de manera integral con nuestro desarrollo de carrera futuro.